jueves, noviembre 23, 2006

Artistas Sobrevalorados - Capítulo 3: Génesis (Era Collins)

Genesis es un grupo que ha despertado odios y pasiones a partes iguales, quizá porque sus dos etapas claramente diferenciadas estilísticamente suscitan constantes divisiones entre criticos y aficionados. De hecho, podríamos haberlos incluido sin dudarlo en otra clasificación, "Artistas infravalorados", y no en la de los sobrevalorados, y aún la diferencia no estaría del todo clara. Un grupo peculiar, principalmente porque designar bajo el mismo nombre a una banda con estilos tan opuestos nunca fue buena idea, como demostró el tiempo. Veamos por qué.

Como se ha dicho hay dos etapas, casi antagónicas, en la vida de Génesis: la "Era Gabriel" (por ser su líder Peter Gabriel) y la "Era Collins" (por comandarlos Phil Collins).

En la primera etapa, Génesis fue considerada una de las referencias clásicas del género sinfónico. Surgidos a finales de los sesenta, durante la primera mitad de la década siguiente el quinteto formado por Tony Banks (teclados), Phil Collins (batería), Peter Gabriel (cantante), Steve Hackett (guitarras) y Mike Rutherford (bajo) nos dejó joyas como 'Selling England by the pound' (1973), considerado uno de los mejores álbumes progresivos de la historia, o 'The lamb lies down on Broadway' (1974), doble disco conceptual que desarrolla una historia de intensa trama existencial. Pero eso es otra historia que veremos en otra ocasión con mayor profundidad.

Génesis: los buenos. Phil con barba.


Así, tras la marcha del cantante Peter Gabriel en 1975 y del guitarrista Steve Hackett en 1977, la banda reorientó su música bajo el liderazgo de Phil Collins hacia coordenadas pop-rock, aunque en un primer momento aún con un cierto sustrato sinfónico, presente en algunos instrumentales de la época. En ese período de transición, dos álbumes como 'A trick of the tail' (1975), ya sin Gabriel, y 'Wind wuthering' (1976), el último disco con Steve Hackett, mantuvieron el tipo pero supusieron el paulatino adiós a su época dorada, paradójicamente la más creativa y brillante pero la menos reconocida en relación a la música que vendría a continuación.



Génesis: los malos, pero con más millones. Quién os ha visto y quién os ve


Collins entonces toma decididamente la riendas sustituyendo al insustituible Peter Gabriel y con '...And then there were three' (1978) hasta 'Calling all stations' (1998) comienza una serie de despropósitos musicales a cada cual más gordo, e induce al grupo a claudicar ante el mandato comercial en una bajada de pantalones sin precedentes en la historia de la música rock. En efecto, desde 'Duke' (1980) los álbumes posteriores se centraron en un pastiche pop-rock a gusto del consumidor. Sí amigos, es triste, pero la época del triunfo comercial de Genesis se desarrolló en los discos 'Abacab', 'Genesis', 'Invisible touch', 'We can´t dance', y los directos 'Three sides live' y 'The way that we walk' (I y II). Collins, quién dedicó buena parte de los ochenta a producir canciones melosas e innecesarias para el deguste de los yuppies más repelentes, trasladó su visión musical a su grupo madre y consignó la persitencia del rock como ilusión de rebeldía.


A partir de ahí, el paulatino peso de la carrera solista de Phil Collins precipitará su marcha tras la gira de 'We can´t dance'. Tras la partida del ínclito en 1996, Banks y Rutherford intentaron seguir en la brecha con el cantante Ray Wilson sacando "Calling all sations" (su disco menos inspirado, sin duda), con escasa repercusión comercial, así que deciden claudicar y poner fin a la historía.

En fin, como conclusión: es conocido que algunos músicos de los sesenta y setenta han tenido una buena vejez, y en ciertos casos incluso han mejorado sus composiciones. Algunos rebajaron drásticamente su calidad pero siguieron dignamente hacia adelante, y otros músicos (como el caso que nos ocupa) fueron mermando su estilo y nivel musical hasta límites absurdos, siendo imposible identificar la música que hacían anteriormente con lo que realizaron. Qué le pasó a Phil Collins por la cabeza para llegar a olvidarse de un pasado tan importante como batería del grupo Génesis en los setenta es algo que dista de nuestro entendimiento, ya que Phil destruyó primero al grupo (haciendo de su etapa de los ochenta totalmente prescindible) y luego se destruyó a él mismo.

¿Esto es todo? No. En los últimos días Génesis han confirmado que se reúnen en 2007 para una serie de conciertos destinados a nostálgicos, aunque repasando sólo su etapa ochentera. En fin, recemos para que no pasen cerca de aquí. Por el bien de nuestros bolsillos y nuestros oídos.

lunes, noviembre 13, 2006

Artistas Sobrevalorados - Capítulo 2: U2

Continuando con la serie que nos ocupa, vamos con 1, 2, 3, 14!, es decir, con U2, grupo irlandés de éxito mundial formado por Bono (Paul Hewson) como cantante, The Edge (David Evans) a la guitarra, Adam Clayton en el bajo y Larry Mullen a los tambores.

Para hacer un breve repaso por su carrera, señalaremos que U2 comenzaron su andadura musical en 1979 con 'Boy', disco recibido con moderado entusiasmo tanto en Gran Bretaña como en Estados Unidos. A finales de 1981 publican un nuevo album, October, disco que se convirtió en un relativo éxito de ventas. Estos primerizos trabajos de U2 a comienzos de los 80 contenían letras de temática religiosa y alguna que otra canción-denuncia contraria a la sociedad hipócrita de los adultos, aspecto que atrajo a no pocos fans identificados con aquellas proclamas.

No obstante, a U2 les costó muchísimo trascender mas allá de su tierra natal, y de hecho sólo se les empezó a tener en cuenta con su tercer disco, 'War', de 1983, primer disco que hablaba explícitamente del conflicto de Irlanda del Norte. Precisamente uno de sus temas bandera, 'Sunday Bloody Sunday', indicaba a las claras esta postura abiertamente política, y de ella se llegaron a vender millones de copias en todo el mundo. Rápidamente el álbum obtiene la categoría de disco de platino en muchos de los países donde es editado, lo que provoca que la banda pase de actuar en pequeños teatros a tocar en estadios para albergar a sus fieles. Aunque serían precisamente estos mastodónticos recitales los que harán que poco a poco el grupo pierda su identidad y su compromiso en favor de mensajes cada vez más demagógicos, como veremos más adelante.

Poco después editan 'The Unforgottable Fire', donde se hacía referencia como tema principal a las drogas, debido a que por esa época la heroína se había instalado firmemente en Irlanda. Con él repitieron el éxito de su anterior disco pero instaurando de verdad su estilo "marca de la casa", por aquello de los sutiles acordes y los dramáticos silencios.

A partir de ahí es cuando comienzan una inacabable tournee de conciertos beneficos luchando por toda causa noble que se les cruzase por el camino. El aspecto solidario de la banda se ve manifestado en el Live Aid de 1985, (nada que ver con el reciente Live 8) lo que les vale de trampolín definitivo para ser conocidos en todo el mundo.

Pero es en 1987 cuando se consagran con 'The Joshua Tree', disco-colección de singles a cada cual más resultón que se agotó en todo comercio habido y por haber a los dos días de salir. Ganaron cuanto premio hubo en ese año, y salieron en todas las portadas de las revistas, incluso en la revista TIME, debido ente otras muchas razones al descarado giro y acercamiento a la música norteamericana, principalmente hacia los sonidos del blues y del gospel, que les abrió para siempre las puertas del éxito en aquél país.

Al siguiente año U2 editan 'Rattle And Hum', tras el cual se toman un periodo de reflexión para decidir su futuro. La banda estaba cansada de sí misma (lógico, al seguir un patrón de canciones casi idéntico y estar promocionándolas en giras interminables), por lo que llegan a proponerse disolver el grupo. Sin embargo, deciden publicar 'Atchung Baby', en una tentativa por cambiar su estilo, donde aniquilan al viejo U2 encargandose ellos mismos de enterrarse, pasando de ser un convencional grupo rock a ser una banda de sonido puramente "industrial".

Bono entonces tuvo la genial idea de convertirse en una estrella de rock como mandan los cánones, y creó un personaje llamado The Fly (La Mosca) vistiendo pantalones de cuero ajustados, ocultando sus ojos bajo unas gafas negras y convenciéndose a sí mismo de que si ya tenía hecha la fama, había que aprovecharla del algún modo. Para rematar la faena, el ZOO TV Tour hizo el resto y se convirtió en su patrón de actuaciones hasta el día de hoy, es decir, shows efectistas en los que Bono usaba el teléfono en el escenario para hacer bromas telefónicas y hacía conexiones vía satélite mientras que en enormes pantallas se emitían imágenes de la banda mezcladas con noticias del telediario y frases subliminales. Es decir, un completo circo en lo que lo menos importante era la música...

Tras ello, siguieron con una caída en picado editando "ZOOropa", muy en la línea ultrasónica de Achtung Baby pero más experimental, extremo y oscuro que el anterior. Lo mismo que cuando editan POP en 1997, álbum que sigue de cerca la línea de la experimentación sonora incorporada desde Achtung Baby pero que igualmente se convierte en un batiburrillo de mensajes sin un objetivo claro y definido. Por supuesto, en aquel año tocó gira en forma de "Pop Mart Tour", a modo de sátira a la sociedad de consumo (pero muy cogida por los pelos) y vendida como "la gira con el escenario más grande jamás construído y con la pantalla de TV mas grande del planeta". Vamos, de una trascendencia loca y muy en su línea. Parecía que lo que se pretendía a esas alturas era que los espectadores se quedaran atónitos, no sólo por el aluvión de luces y sonido "surround" y otros aderezos, sino también por la perturbadora confusión reinante. Como ir al cine a ver una película de ciencia ficción, pero con músicos encima de un escenario.

Llega el año 2000 y a Bono se le va definitivamente la cabeza. Se decide a salvar el mundo entrevistándose con los lideres del FMI, con Bill Clinton y con el Papa si hacía falta, creando un proyecto llamado Jubilee 2000, una organizacion que buscaba abolir la deuda externa de los paises mas pobres. Mientras tanto, era posible ver un día a un cínico Bono en una gala por los niños que se mueren de hambre en el mundo y al día siguiente verlo llegar a un concierto en un avion privado que consume más de lo que 10000 niños necesitan para comer... Toda una demostración de coherencia.

A finales del 2000 llega como no podia ser de otro modo una vuelta a los origenes, cansados de tanto experimento sin sentido, con el disco "All that you cant leave behind". La banda aquí deja de recurrir a la tecnología y apuesta por un sonido mas crudo, volviendo a lo basico y a las melodias sencillas (vamos, más bien una vuelta a lo mismo de siempre). Por supuesto ganan todos los Grammys del mundo, con lo que eso supone...

Por último, el grupo graba en el 2004 "How to dismantle an atomic bomb", la enésima repetición de los mismos esquemas, y se van de gira a promocionarlo, con la sonora apoteosis del Live 8 en el 2005. En este macroconcierto, organizado por Bob Geldof a nivel mundial, el grupo ondea su bandera de la solidaridad y el compromiso social, y claro, Bono en su salsa aprovecha para protestar por la vergonzosa situación del continente negro y que si tal y que si cual. Pero en ninguna estrofa cantó que su fortuna equivale a toda la deuda externa de Ruanda, así que la gente siguió aplaudiendo y aquí paz y después gloria. Vaya por Dios, se le olvidó en ese momento de euforia... Únicamente con la gira de Vértigo, U2 recaudó 185 millones de dólares, la misma cantidad de ingresos anuales de Burundi. Pero claro, los mecenas de las causas altruistas siguen con sus mansiones en Dublín, y el que venga detrás que arree.

A finales del mismo año, y para rematar la faena, la banda ingresa en el Rock and Roll Hall of Fame y el encargado de presentarlos es.... Bruce Springsteen (si es que no podía ser de otra forma, estaba claro), quien luego los acompaña durante la cancion "I still haven't found what I'm looking for". Gloria y honor a borbotones para una banda cuyo gran mérito (no al alcance de todos, bien es cierto) es haber sido capaces de convertir los temas más sosos y triviales en superéxitos.